El disco
Si eres fan de Morrissey o del rock alternativo, seguramente conoces su exitoso single Everyday Is Like Sunday, lanzado en 1988 como el segundo sencillo de su álbum debut en solitario, Viva Hate. Esta canción, coescrita por Morrissey y el ex productor de The Smiths, Stephen Street, es una de las más emblemáticas de la carrera del artista británico, y ha sido aclamada por la crítica y el público por su letra evocadora y su música bombástica.
La inspiración lírica de Morrissey para Everyday Is Like Sunday provino de la novela On the Beach, de Nevil Shute, que narra la vida de los supervivientes de una guerra nuclear en una ciudad costera de Australia. Morrissey traslada esa atmósfera de desolación y aburrimiento a una localidad costera inglesa, donde el protagonista de la canción se siente atrapado y desea que llegue el apocalipsis o una bomba nuclear que acabe con todo. La canción refleja el desprecio de Morrissey por la cultura popular y el consumismo, y su anhelo de escapar a un lugar mejor.
Stephen Street, que había ofrecido sus ideas musicales a Morrissey para usarlas como caras B de The Smiths, también contribuyó con el bajo, que según él se inspiró en Echo & the Bunnymen. La canción tiene un sonido épico y grandilocuente, con una melodía pegadiza y unos arreglos orquestales que le dan un toque dramático. La voz de Morrissey es expresiva y melancólica, transmitiendo la angustia y el hastío del personaje.
Everyday Is Like Sunday fue incluida en el álbum Viva Hate, y en el álbum recopilatorio Bona Drag. Al ser lanzada como single, junto con las caras B Disappointed, Will Never Marry y Sister I’m a Poet, tuvo un gran éxito comercial y crítico, alcanzando el puesto número nueve en el Reino Unido y recibiendo excelentes críticas por su letra evocadora y su música bombástica. Animado por el éxito del single, Morrissey continuó trabajando con Street para los siguientes singles y el resto de Viva Hate.
Desde su lanzamiento, Everyday Is Like Sunday se ha convertido en una de las canciones más exitosas de Morrissey y sigue siendo aclamada por los críticos modernos. También ha inspirado la película canadiense de culto Everyday Is Like Sunday.
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