El disco
En una fría tarde de otoño, las notas de Who Do You Love comenzaron a resonar en las calles de la ciudad. Las luces de neón parpadeaban en sincronía con el ritmo, atrayendo a los transeúntes hacia la entrada de un pequeño club nocturno. Allí, en el escenario, estaba Rodney Saulsberry, con su micrófono en mano y una sonrisa en los labios. La multitud se agolpaba, ansiosa por sumergirse en la música.
La introducción de la canción era como un hechizo. El bajo pulsante y los sintetizadores creaban una atmósfera irresistible. Las cabezas se movían al compás, los cuerpos se balanceaban, y todos se dejaban llevar por la magia de la pista de baile. Rodney, con su voz suave pero llena de pasión, cantaba sobre el amor y la incertidumbre. ¿Quién amas realmente? ¿Quién te ama a ti?
El coro se elevaba como un grito de deseo. “Who do you love? Who do you love?” Las luces se intensificaban, y los corazones latían al unísono. En ese momento, todos éramos cómplices de la búsqueda del amor verdadero. Las parejas se abrazaban, los solitarios se perdían en la melodía, y los recuerdos de amores pasados flotaban en el aire.
El maxisingle ofrecía diferentes versiones de la canción. La versión vocal radio mix era la más accesible, perfecta para la radio y las fiestas. Pero también estaban la versión instrumental mix, donde los instrumentos hablaban por sí mismos, y la versión extendida de 12", que te sumergía en un trance musical. Y no olvidemos la bassapella mix, donde el bajo se apoderaba de tus sentidos.
Detrás de esta obra maestra estaban los talentosos:
- Wayne Linsey, el productor y arreglista que tejía los hilos musicales.
- Keith Cohen y Steve Beltran, los magos del remix que dieron nueva vida a la canción.
- Peter Arata, el asistente de ingeniero que afinaba cada nota.
- Y, por supuesto, Rodney Saulsberry, el alma detrás de la voz.
Who Do You Love no solo fue un éxito en las pistas de baile, sino también un testimonio de la creatividad y la pasión de Rodney Saulsberry. Aunque los años han pasado, su música sigue resonando en nuestros corazones. Así que, la próxima vez que escuches esa melodía inconfundible, cierra los ojos y pregúntate: ¿quién amas realmente?
¡Que la música siga vibrando en tu alma! 🎶
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