El disco
El punk rock es un género musical que surgió a mediados de los años 70 como una forma de expresión contestataria, crítica y rebelde ante la sociedad. Bandas como The Clash, The Jam y The Sex Pistols fueron pioneras en crear un sonido crudo, rápido y agresivo que desafiaba las normas establecidas. Sin embargo, el punk no se limitó a un solo país o escena, sino que se extendió por todo el mundo, dando lugar a diversas variantes y subgéneros.
Uno de estos subgéneros fue el punk rock británico de principios de los años 80, que se caracterizó por una mayor velocidad, intensidad y violencia en sus letras y actitudes. Bandas como The Exploited, Discharge y GBH llevaron el punk a un nivel más extremo, influyendo en el nacimiento del hardcore punk y el thrash metal. Dentro de esta escena, hubo una banda que destacó por su calidad y originalidad: The Enemy.
The Enemy fue una banda formada en Derby, Inglaterra, en 1977 por Mark Woodhouse (voz), Steve Herrington (bajo), Mez Rossi (guitarra) y Herro Mellors (batería). Su sonido estaba influenciado por bandas como The Clash, The Jam y The Sex Pistols, pero también incorporaba elementos de ska, reggae y rockabilly. Sus letras trataban temas como la guerra, la política, la religión y la vida cotidiana desde una perspectiva crítica y sarcástica.
The Enemy solo lanzó dos singles en su corta carrera: 50,000 Dead en 1981 y Punk’s Alive en 1982. Ambos son considerados como joyas del punk rock británico, pero el segundo es especialmente memorable por su calidad y variedad. El single contiene tres canciones: Punk’s Alive, Piccadilly Sidetracks y Twist & Turn. Cada una de ellas muestra un aspecto diferente del estilo de la banda.
Punk’s Alive es la canción que da nombre al single y la más representativa del sonido de la banda. Es una canción rápida, potente y pegadiza que reivindica el espíritu del punk frente a las modas pasajeras y los intentos de control social. La canción comienza con un riff de guitarra que recuerda al de London Calling de The Clash, seguido de una batería frenética y un bajo pulsante. La voz de Mark es clara y contundente, cantando frases como “We don’t need no education, we don’t need no thought control” o “We’re the punks and we’re alive”. El estribillo es simple pero efectivo: “Punk’s alive, punk’s alive, punk’s alive”. La canción termina con un solo de guitarra que demuestra la habilidad de Mez.
Piccadilly Sidetracks es la segunda canción del single y la más melódica y divertida. Es una canción que narra las aventuras de un joven punk que va a Londres a buscar diversión y se encuentra con todo tipo de personajes y situaciones. La canción tiene un ritmo más lento y bailable que la anterior, con un toque de ska y reggae. La guitarra de Mez hace unos acordes rítmicos y unos solos melódicos, mientras que el bajo de Steve hace unas líneas funkys. La voz de Mark es más suave y humorística, cantando frases como “I met a girl called Julie who said she’d show me round / She took me to a disco where they played the latest sounds” o “I met a guy called Johnny who said he’d give me a ride / He took me to his car and then he tried to get inside”. El estribillo es pegadizo y divertido: “Piccadilly sidetracks, Piccadilly sidetracks / That’s where I spend my time / Piccadilly sidetracks, Piccadilly sidetracks / That’s where I lose my mind”. La canción termina con un coro de voces que repite el estribillo.
Twist & Turn es la tercera y última canción del single y la más rockera y variada. Es una canción que habla de las dificultades y contradicciones de la vida, con un tono más serio y reflexivo que las anteriores. La canción tiene un ritmo más complejo y cambiante que las otras, con un toque de rockabilly y blues. La guitarra de Mez hace unos riffs potentes y unos solos virtuosos, mientras que el bajo de Steve hace unas líneas melódicas y armoniosas. La voz de Mark es más grave y expresiva, cantando frases como “Life is full of twists and turns, you never know what’s round the corner” o “Sometimes you feel like giving up, sometimes you feel like fighting on”. El estribillo es sencillo pero profundo: “Twist and turn, twist and turn / That’s the way life goes / Twist and turn, twist and turn / That’s the way it flows”. La canción termina con un solo de guitarra que se funde con el sonido de una sirena.
El single de The Enemy titulado Punk’s Alive es un clásico del punk rock británico de principios de los años 80 que merece ser escuchado y apreciado por cualquier amante de la música. La banda demuestra su talento y personalidad en cada una de las tres canciones, creando un sonido único y original que combina influencias diversas. El single es una muestra de la creatividad, la energía y el espíritu del punk, que sigue vivo y vigente en la actualidad.
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