El disco
Made in Heaven es un álbum recopilatorio que reúne a algunos de los mejores exponentes de la música negra de los años 70 y 80, con temas que expresan su espiritualidad, su compromiso social y su optimismo ante la vida. El álbum ofrece una variedad de estilos que van desde el disco al gospel, pasando por el soul, el synth-pop y el reggae. Cada canción es una joya que invita a la reflexión, al agradecimiento y a la celebración.
El álbum se abre con I Want To Know You, una canción de Philip Bailey, ex miembro de Earth, Wind & Fire, que habla de su deseo de conocer a Dios y de sentir su presencia en su vida. La canción tiene un ritmo contagioso y una melodía pegadiza, con un coro que repite “I want to know you, I want to show you”. La voz de Bailey es potente y emotiva, y se acompaña de una sección de vientos y una guitarra eléctrica.
La segunda canción es Do Not Pass Me By, interpretada por el coro gospel The Inspirational Choir Of The Pentecostal First Born Church Of The Living God. Es una versión del himno tradicional del mismo nombre, que pide a Dios que no se olvide de los necesitados y los pecadores. La canción tiene un aire soul, con un piano, un órgano y una batería que marcan el ritmo. El coro canta con fervor y armonía, alternando solistas masculinos y femeninos.
La tercera canción es San Damiano, del cantante británico Sal Solo. Es una canción inspirada en la historia de San Francisco de Asís, que tuvo una visión de Cristo en la cruz en la capilla de San Damiano. La canción tiene un estilo synth-pop, con sintetizadores, cajas de ritmos y efectos sonoros. La voz de Solo es suave y melódica, y canta en inglés e italiano. La letra habla de la conversión de San Francisco y de su mensaje de paz y amor.
La cuarta canción es Lean On Me, del cantautor estadounidense Bill Withers. Es una de las canciones más famosas del álbum, y una de las más versionadas de la historia. Es una canción que habla de la amistad, del apoyo mutuo y de la solidaridad. La canción tiene un estilo soul, con un piano, un bajo y una batería que crean una atmósfera íntima y cálida. La voz de Withers es grave y expresiva, y canta con sencillez y sinceridad.
La quinta canción es Storms Of Troubled Times, de la cantante de jazz Etta Jones. Es una canción que habla de las dificultades que se presentan en la vida, pero también de la esperanza que se mantiene en medio de ellas. La canción tiene un estilo blues, con una guitarra acústica, un contrabajo y una armónica que acompañan a la voz rasgada y emotiva de Jones. La letra es poética y metafórica, comparando las tormentas con los problemas y el sol con la fe.
La sexta canción es Love Lifted Me, del cantante de gospel Jessy Dixon. Es una versión del himno tradicional del mismo nombre, que habla de cómo el amor de Dios rescata al hombre de la desesperación y lo eleva a la salvación. La canción tiene un estilo disco, con una batería electrónica, un bajo, una guitarra y unos teclados que crean un ritmo bailable y alegre. El coro canta con entusiasmo y energía, y Dixon hace gala de su voz potente y aguda.
La séptima canción es Motherless Child, del músico de soul Billy Preston. Es una versión del espiritual negro del mismo nombre, que expresa el dolor y la soledad de un niño que ha perdido a su madre. La canción tiene un estilo funk, con un órgano Hammond, un bajo, una guitarra y una batería que crean un groove profundo y envolvente. La voz de Preston es grave y melancólica, y canta con sentimiento y pasión.
La octava canción es I’ll Be Thinking Of You, del cantante de gospel Andrae Crouch. Es una canción que habla de la relación entre Dios y el hombre, y de cómo Dios siempre está pensando en sus hijos y cuidando de ellos. La canción tiene un estilo pop, con una guitarra acústica, un piano, un bajo y una batería que crean una melodía dulce y suave. El coro canta con armonía y dulzura, y Crouch hace gala de su voz tierna y angelical.
La novena canción es Many Rivers To Cross, del cantante de reggae Jimmy Cliff. Es una de las canciones más famosas del álbum, y una de las más representativas del género. Es una canción que habla de la lucha por la libertad, la justicia y la dignidad, y de los obstáculos que se encuentran en el camino. La canción tiene un estilo reggae, con una guitarra eléctrica, un bajo, una batería y unos teclados que crean un ritmo sincopado y relajado. La voz de Cliff es aguda y vibrante, y canta con fuerza y convicción.
La décima canción es Mighty Clouds Of Joy, del grupo de gospel Mighty Clouds Of Joy. Es una canción que habla de la alegría que produce el saberse amado por Dios, y de cómo esa alegría se contagia a los demás. La canción tiene un estilo soul, con una sección de vientos, un piano, un bajo y una batería que crean un ritmo animado y festivo. El grupo canta con alegría y energía, alternando solistas masculinos y femeninos.
La undécima canción es Steal Away, interpretada por el coro gospel New York Community Choir. Es una versión del espiritual negro del mismo nombre, que habla de escapar de la esclavitud hacia la libertad. La canción tiene un estilo gospel, con un órgano, un piano, un bajo y una batería que marcan el ritmo. El coro canta con fervor y armonía, alternando solistas masculinos y femeninos.
La duodécima canción es (Your Love Keeps Lifting Me) Higher And Higher, del cantante de soul Jackie Wilson. Es una de las canciones más famosas del álbum, y una de las más versionadas de la historia. Es una canción que habla del amor romántico, y de cómo ese amor eleva el ánimo y el espíritu. La canción tiene un estilo soul, con una sección de vientos, un piano, un bajo y una batería que crean un ritmo bailable y alegre. La voz de Wilson es potente y aguda, y canta con pasión y entusiasmo.
La decimocuarta canción es Fill My Cup, interpretada por el coro gospel The London Community Gospel Choir, dirigido por Bazil Meade. Es una canción que habla de la sed de Dios, y de cómo solo Él puede llenar el vacío del alma. La canción tiene un estilo gospel, con un piano, un órgano, un bajo y una batería que marcan el ritmo. El coro canta con fervor y armonía, alternando solistas masculinos y femeninos.
La decimoquinta canción es Nothing Can Seperate Me (From Your Love), de la cantante de soul Candi Staton. Es una canción que habla del amor incondicional de Dios, y de cómo nada puede separar al creyente de su amor. La canción tiene un estilo soul, con una guitarra eléctrica, un bajo, una batería y unos teclados que crean una melodía suave y relajada. La voz de Staton es grave y expresiva, y canta con sentimiento y pasión.
La decimosexta canción es Harvest For The World, del grupo de soul The Isley Brothers. Es una canción que habla de la justicia social, y de cómo el mundo necesita compartir sus recursos y cuidar del medio ambiente. La canción tiene un estilo soul, con una guitarra eléctrica, un bajo, una batería y unos teclados que crean una melodía suave y relajada. El grupo canta con armonía y dulzura, alternando solistas masculinos y femeninos.
La decimoséptima canción es Sailin’ On The Sea Of Your Love, interpretada por la cantante de gospel Shirley Caesar junto al cantante de soul Al Green. Es una canción que habla del amor romántico, y de cómo el amor de Dios es como un mar que los envuelve y los protege. La canción tiene un estilo soul-gospel, con una guitarra acústica, un piano, un bajo y una batería que crean una melodía dulce y suave. El dúo canta con armonía y ternura, alternando solistas masculinos y femeninos.
La decimoctava y última canción es Why Can’t We Live Together, del cantante de soul Timmy Thomas. Es una de las canciones más famosas del álbum, y una de las más influyentes en la música pop. Es una canción que habla de la paz, la tolerancia y la armonía entre las personas, y de cómo el amor puede vencer al odio. La canción tiene un estilo soul, con un órgano electrónico, una caja de ritmos y una guitarra que crean una melodía minimalista e hipnótica. La voz de Thomas es suave y melódica, y canta con sencillez y sinceridad.
Made in Heaven es un álbum recopilatorio que ofrece una selección de canciones inspiradoras, conmovedoras y optimistas, que transmiten un mensaje de amor, fe y esperanza. El álbum es una muestra de la diversidad y la calidad de la música negra, con artistas de diferentes géneros y épocas, que comparten su visión y su talento. El álbum es una invitación a disfrutar de la vida, a agradecer los dones recibidos y a compartirlos con los demás.
